viernes, 31 de enero de 2014

EL GRAN DÍA







Parecía que no iba a llegar y ya está aquí. Hoy viernes, a las ocho de la tarde, presento mi novela Bajo los Tilos y lo hago en la librería Luque, ligada a mi faceta de lectora empedernida desde siempre. ¿Quién me iba a decir, cuando recalaba en ella para comprar novelas que algún día venderían la mía? Cosas de la vida, que hace que al final todo se cierre como un gran círculo. 
Esta noche Bajo los Tilos se pone de largo, y es así, porque ya tiene una larga andadura en el mundo literario, con miles y miles de lectores, pero hoy es su debut, su estreno en papel y en esa fiesta estaré rodeada de mi familia, mis amigos y lectores fieles que desean acompañarme en este importante y especial momento. A todos desde ya, gracias. La emoción me embarga y aún lo hará más cuando en el reloj den la ocho, pero quiero que sepáis que aunque no estéis presentes lo estaréis en mi corazón y recibiréis en publico mi agradecimiento. 
¡Mañana os cuento!




María José Moreno: "Los personajes de 'Bajo los tilos' están al servicio de las emociones" ( Diario Córdoba - 31/01/2014 )

martes, 28 de enero de 2014

Este jueves un relato: Deporte













Personal training


La báscula no engaña, cinco kilos más que la última vez y eso que me he pesado desnuda —dijo Berta en voz alta  muy cabreada.
Mañana comienzo con la dieta, otra vez, a mi edad no me puedo permitir coger ni un kilo más, si no el médico me dirá que las rodillas no me aguantarán, que me va a subir el colesterol, el del malo, por supuesto y como no, el azúcar… pensó mientras se embutía en una camisa que le hacía una chorrera por cada michelin y en el pantalón, más ancho que tenía, y por ello el más cómodo por ahora.
Camino del trabajo seguía erre que erre con los cinco kilos por más que su compañera Marta intentaba quitarle importancia.
—Me voy a buscar un gimnasio —dijo Berta de pronto.
—¿Tú crees que estás para esos trotes?
—Desde luego, hija, que desagradable eres. ¿Qué tengo yo que no tengan esas que se pasan el día haciendo deporte subidas en las máquinas o bailando sobre un cajón?
Step.
—Stepe, ¿Eso qué es?
—Así se llama la plataforma antideslizante sobre la que uno se sube y se baja. Es una palabra inglesa y se traduce por escalón.
—Que repipi eres, Marta. Bueno pues tendré que hacer eso o cualquier otro deporte porque con dieta sólo no volveré a mi peso.
—Han inaugurado un gym nuevo y dicen que está genial.
—Dame la dirección que me voy a llegar en la media hora del café.
Cogió un taxi que le llevó hasta la misma puerta del gimnasio. Quedó deslumbrada por el edificio. Una amable señorita le paseó por las instalaciones y le explicó con detalle todo a lo que tenía acceso por una modesta cuota de 100 euros al mes. Berta la miraba desconcertada porque no entendía la jerga que utilizaba: fitball, Tai-Chi, streching, zumba. corebar... con las que nombraba las clases de las que disponían, pero sí entendió perfectamente el precio. Mentalmente echó cuentas y se lamentó de que justo ahora, el gobierno hubiera decidido bajarle un cinco por ciento el sueldo, pues con ello habría podido hacer frente al pago, pero…
—No se lo piense —le dijo la señorita leyéndole el pensamiento—. Es una ganga.
—Bueno, eso de que es una ganga —repitió con ligera sorna.
—Claro que sí. Mire, usted tiene una edad…
—¡Vaya con la edad! Hoy a todos les ha dado por llamarme vieja.
—Perdone señora, le decía que tiene una edad en la que no puede arriesgarse a hacer ejercicios bruscos que puedan dañarla.
—¡Ah! Eso es otra cosa. Es verdad, lleva toda la razón, pero es que me tienen una liada con la edad.
Rieron.
—Pues eso, que ahí es donde está la ganga; porque en el precio se incluye un personal training.
—¿Un qué? —preguntó asustada.
—Un personal training o un entrenador personal, en español, le indicará lo que debe hacer en cada momento vigilando que lo realice bien y no se lesione. Mire allí, al fondo de la sala, hay un señor con Enrique, uno de nuestros entrenadores.
—Berta, entrecerró los ojos para ver mejor, porque la coquetería le impedía llevar gafas para corregir su miopía, y entrevió a un anciano de pelo blanco y bigote del mismo color con un Adonis a su lado.
Aquella visión fue suficiente para que se decidiera. Se despidió de la joven tras abonar tres mensualidades por adelantado y haber reservado una cita con Enrique, el entrenador personal, para esa misma tarde. Cuando regresaba al trabajo pensó que dieta y deporte con aquel chico, era la mejor opción. Todo iría de maravilla.
A las cinco de la tarde rebasaba nerviosa el umbral de la puerta de entrada. Otra chica, aún más joven, la recibió. Ella, orgullosa, enseñó el carnet y fue directa a los vestuarios. Se había comprado un conjunto azul celeste que la dependiente dijo que era una monería.
—Señora, su entrenador la espera —le gritó la joven desde la puerta.
Berta se apresuró, no quería hacerle esperar. Se atusó el pelo y se puso glos en los labios. El deporte no estaba reñido con el glamour, se dijo.  Salió sonriente y seductora.
—Hola, Berta. Soy Enrique —dijo el señor anciano de pelo blanco y bigote del mismo color adelantando la mano para estrechársela.


Reedición corregida. 
© María José Moreno, 2014

Más sobre el deporte en casa de Yolanda

Palabra 5 de 52




Sindel nos propone la palabra FELICIDAD para esta semana.
Después de mucho pensarlo de intentar escribir algo que no ha resultado, de buscar una canción, de intentar hacer un poema (con lo mal que se me da la poesía jajaja), he pensado que nadie es más feliz que un niño sano y amado;  por eso os dejo dos fotografías de Blanca y Nacho, que cuando las miro me hacen sonreír y me alegran el alma. Espero que a los que me visiten les suceda este milagro. 

domingo, 26 de enero de 2014

El ciclo de la vida






Un año más mis camelias han florecido en enero; un año más el ciclo de la vida no se ha interrumpido, la planta sigue viva y yo, también, para disfrutar de su belleza.
Por eso lo quiero celebrar con vosotros. Como dice la canción que esto sea un ciclo sin fin, que lo envuelva todo y a todos.


Nants ingonyama bagithi baba

Sithi uhm ingonyama
Nants ingonyama bagithi baba
Sithi uhm ingonyama
Siyo nqoba
Ingonyama nengw' enamabala...

Desde el día que al mundo llegamos
Y nos ciega el brillo del sol
Hay más que mirar donde otros solo ven
Más que alcanzar en lugar de soñar

Son muchos más los tesoros
De los que se podrán descubrir
Y bajo el sol protector con su luz y calor
Aprenden todos a convivir

En un ciclo sin fin que lo envuelve todo
Y aunque estemos solos debemos buscar
Y así encontrar nuestro gran legado
En el ciclo, el ciclo sin fin

Es un ciclo sin fin que lo envuelve todo
Y aunque estemos solos debemos buscar
Y así encontrar nuestro gran legado
En el ciclo, el ciclo sin fin


miércoles, 22 de enero de 2014

Este jueves un relato: Personaje invitado








El chico pelirrojo creyó oír un ruido y se escondió a toda velocidad detrás de las cortinas. Desde su escondite veía  parte de  la habitación iluminada por el resplandor de la chimenea. La caja fuerte se había quedado abierta y en el suelo, el señor Parker estaba en la posición que había quedado después de que él le asestara un golpe con el atizador de la chimenea, con la mala fortuna de que se diera en su caída con el pico de la mesa de mármol en la que el señor exhibía su colección de pipas; ahora, desparramadas por el suelo. 
Con el corazón desbocado, apretaba con todas sus fuerzas el collar de brillantes que había robado y que le serviría para que aquellos desalmados que habían raptado a su novia la dejaran en libertad. Se lamentó de haber perdidos unos minutos embelesado por la belleza de la joya, que se le antojaban cruciales para poder haber huido. Ya no escuchaba nada. Le parecía que el silencio era absoluto y por tanto el momento para salir de aquella habitación. Con sigilo se adentró por el pasillo que llevaba a la cocina para escapar por la puerta de servicio. Cuando iba a salir escuchó unos chillidos y unos pasos aligerados. Alguien había descubierto el cadáver del señor Parker. Comenzaba su carrera  cuando un dóberman le cerró el camino, lo miraba con fijeza enseñándole los dientes y le lanzaba  unos gruñidos espeluznantes.
—¡Alto o disparo! —dijo Monsieur Poirot con el arma en la mano apuntando al joven.
—No dispare —respondió con voz trémula el chico pelirrojo girándose y levantando las manos.
—Aquí tenemos al asesino —explicó el detective muy ufano mirando a la señora Parker. 
La señora Parker contemplaba la escena con incredulidad. No entendía cómo había sucedido aquella tragedia en unos pocos  minutos. Su marido se había levantado de la mesa después de cenar para buscar un puro que ofrecer a su invitado, el detective Hércules Poirot y, ahora estaba muerto. Fue hasta el ladrón, le arrancó el collar y dirigiéndose al detective le dijo:
—Por esta vez, su teoría no se va a cumplir, el asesino no es el mayordomo es lechero—dijo con típica flema inglesa.
—Ce vulgarité! —exclamó defraudado retorciéndose el bigote, el detective.
La señora Parker le dio la espalda y cuando se alejaba musitó:
—¡Belga tenía que ser!
 Más relatos e invitados en el blog de Loquita con diploma

martes, 21 de enero de 2014

Palabra 4 de 52







Este semana nos propone Sindel la palabra Mentira.

En cuanto leo esta palabra el Síndrome de Münchhausen, que toma su nombre de Karl Friedrich Hieronymus, Baron de Münchhausen, (1720-1797), quien se hizo famoso por contar historias de aventuras fantásticas que nunca le habían sucedido, como haber bailado en el estómago de una ballena o haber viajado a la luna. Es un trastorno psiquiátrico que se caracteriza por inventar dolencias para asumir el papel de enfermo. 
El paciente lo hace con síntomas físicos o psicológicos fingidos o producidos intencionadamente. Se trata de mentiras patológicas. El origen de su motivación y su necesidad de llamar la atención no son conscientes para el paciente y nunca a hay un beneficio secundario, lo que lo diferencia de la simulación.
El problema se complica con el llamado Síndrome de Münchhausen por poder; descrito por Meadow, pediatra inglés, por primera vez en el año 1977. Es una forma extraña de abuso que implica la fabricación reiterada de enfermedades en un niño por parte de un adulto; Casi siempre es la madre, la que miente acerca de los síntomas que presenta su hijo o incluso  de manera secreta interfiere en el organismo del niño con el objetivo de producir síntomas o signos, por ejemplo, a través de una sofocación subrepticia, o de la administración de medicamentos o sustancias no recetadas e innecesarias, cuya cantidad no está determinada. El niño es llevado en forma reiterada para recibir ayuda y cuidado médico. El resultado de lo anterior es una cantidad de procedimientos médicos, tanto de diagnóstico como terapéuticos, inútiles y que pueden poner en peligro la vida del niño.

  

sábado, 18 de enero de 2014

Este domingo: Entrevista








El martes  pasado se emitió la entrevista que había grabado en la CCF Radio (Córdoba Club de Fútbol)  para el programa Luna de Cuentos (104,7 FM) que lleva la escritora cordobesa María del Pino.
Y aunque sea una emisora de un equipo de fútbol no hablamos para nada de eso, sino que hablamos de literatura, lo pasamos muy bien y además leí uno de mis relatos más emotivos: "inocencia perdida" que está al principio de todo. No te lo pierdas.
Si te apetece escucharme, aquí tienes mi parte de la entrevista y en el blog de María del Pino, el programa completo.


viernes, 17 de enero de 2014

Palabra 3 de 52










Esta semana  nos propone  Sindel, la palabra FUTURO, que me lleva a los éxtasis temporales, tema existencialista por esencia.

El futuro es algo que nos atenaza por su lejanía.
El futuro es algo que a veces se nos antoja imposible de adquirir.
El futuro es vivido con miedo ante lo desconocido.
El futuro es un imaginario de posibilidades.
En el futuro está la muerte, la NADA.

Sin futuro no hay progreso personal.
Sin futuro no existen metas que lograr, anhelos que conseguir.
Sin futuro no sabríamos cómo afrontar un nuevo día.
El futuro es parte de nuestra existencia, algo pegado a nosotros, que nos guía.
El futuro a veces es tan incierto que nos paraliza.

Una manera de asirlo, sin que nos dañe, es mediante la fórmula existencialista: Utilizar el presente-pasado en lugar de pasado, el presente-presente para el presente actual y el  presente-futuro por el futuro.

De esta manera somos capaces de abarcarlo, reconocemos su cercanía, lo hacemos nuestro y lo imbricados en nuestro quehacer diario que ya ha dejado de ser presente y se ha convierte en futuro, sin darnos cuenta.

© María José Moreno, 2013

domingo, 12 de enero de 2014

Una semana marcada por las emociones.





La emociones se definen como movimientos afectivos intensos y bruscos. Las emociones son un pilar básico en nuestro desarrollo evolutivo, nos ayudan en nuestro aprendizaje de enfrentamiento al medio ambiente y contribuyen a nuestra supervivencia.
Las emociones nos acompañan siempre, aunque no nos demos cuenta de ello. Cumplen un papel en nuestro quehacer diario. Las emociones  influyen en nuestra comunicación con los demás y colorean el mundo percibido de una manera especial y, por supuesto, la percepción de nosotros mismos:  cómo nos sentimos, qué sentimos, de qué manera lo sentimos, por qué lo sentimos...
Las emociones básicas son la alegría, la ira, la ansiedad, la sorpresa, la confianza, la pena, el miedo y el amor y, clásicamente, se han adscrito solo a los humanos, aunque cada vez hay más estudios que reflejan que los animales también son portadores de emociones (hablaremos otro día de este interesante tema).

Y me diréis, ¿a qué viene esto de hablar de las emociones? Hemos llegado al meollo de la cuestión porque quería contados que para mí esta semana ha sido una semana plena de emociones en muchos aspectos. 
He sentido la magia de la alegría en sus aspectos de felicidad y satisfacción, al ver mi novela Bajo los Tilos publicada en papel y ocupando un lugar en los estantes de las librerías, y cómo no, al escuchar la exposición que mi hija hizo de sus Tesis Doctoral; la brillantez y la soltura con que se defendió de las preguntas de los miembros del tribunal y todo ello adornado con esa sonrisa que la caracteriza desde que nació y que muchos ya conocéis. 
La salida de mi novela, antes de la fecha prevista, provocó a su vez, una emoción de sorpresa, acompañada de ansiedad y del consecutivo miedo. Ya era real. Tras  mucho tiempo fantaseando cómo sería, se había cumplido; entonces, me dejé vencer por el temor a los resultados, a que no fuera bien aceptada, a que no se vendiera... Esto me acompañó durante un breves instantes hasta que otras emociones más fuertes vencieron. La confianza del trabajo bien hecho, más de trece mil lectores que habían tenido la oportunidad de disfrutar de su lectura, ciento veintiocho comentarios... y, el amor de mis amigos, de mis seguidores que prestos disfrutaron de mi alegría y se fotografiaron con mi novela como si fuese un preciado tesoro me devolvieron el hechizo de la alegría, de la felicidad compartida, de la excitación, de las ganas de continuar escribiendo. 
La pena vino de la mano de mi otra novela La caricia de Tánatos. Después de más de cinco meses de  perdía su sitio entre las cien novelas más vendidas en Amazon;  en este caso, la pena tenía que ver con la impotencia y no con la desesperación o la decepción sus compañeras habituales. 
La única que no me ha acompañado esta semana ha sido la ira
No ha tenido cabida en mi vida esa emoción relacionada con la frustración, el descontento, la irritabilidad, el rechazo... Y me siento muy bien por ello. Ninguna nube gris ha empañado mi cielo azul. Y esto es de reseñar, y yo diría aún más, para dar saltos de alegría. La vida no suele ofrecernos muchas semanas así, por ello doy  gracias, y cruzo los dedos para que en las próximas semanas, de este año que comienza y de los venideros, aunque haya nubes grises no se transformen en tormenta. 
¿Y tu semana cómo fue?

martes, 7 de enero de 2014

Este jueves un relato: Un regalo con inspiración




Gloria y Mikel corrían sin parar. Miraron hacia atrás comprobando que, por el momento, no los perseguían. Se escondieron detrás de un árbol que tenía un tronco muy ancho para recuperar el aliento. El ruido de los pájaros, en aquella zona de la selva amazónica, era ensordecedor. Gloria bajo la cremallera de su chaqueta y extrajo unas ajadas páginas escritas en latín.
—Mira lo que dice Mikel: “Los trinos nublarán tu mente”. Vamos bien. ¿Por qué no buscas con el GPS si en la persecución nos hemos salido de la ruta?
Mikel comprobó que su destino se hallaba más cera de lo que esperaban por lo que insistió a Gloria para que continuaran.
Al cabo de diez minutos apareció ante ellos la imagen que buscaban. Un ser de piedra era la entrada a la cueva; la puerta era una boca, incluso con dos dientes y las ventanas, los ojos. Subían los escalones y Gloria se paró en seco.
—¿De verdad Mikel crees que hacemos bien entrando ahí? Parece que está muy oscuro
—Es tu obligación, por eso te dejaron el manuscrito en herencia.
Muertos de miedo entraron por la puerta-boca. La poca luz que entraba  por los ojos se fue perdiendo conforme se adentraban hasta que dejaron de ver y la oscuridad fue total. Olía a muerto y comenzaron a oír un horripilante. Mikel buscaba en sus bolsillos la caja de cerillas y Gloría, al notar que algo se le metía por la pernera del pantalón, dio un grito de pavor:
—Aaaaaaaaaaaaaaaaaa —el niño pegó un salto en la cama y el padre siguió relatando...
Al mismo tiempo, Mikel encendía una cerilla para comprobar que el suelo que pisaban estaba repleto de serpenteantes víboras de color negro que se introducía por todas partes.
—¡Que asco! —exclamó el niño tapándose los oídos.
—Venga chicos yastá bien de historietas. Hora de dormir que mañana hay que madrugar que hay cole.
—Buenas noches mamá, buenas noches papá —dijo el hijo mientras los padres le tapaban y le daban un beso.
Cerraron la puerta y se dirigieron a su dormitorio. El papá estaba feliz. Le encantaba contarle historias a su hijo para que se durmiera. La madre muy enfadada. Entonces muy seria, le dijo:
—Ven a la cama Indiana Jones, que esta noche t’as cubierto de gloria. Cuando se despierte de madrugá gritando como un descosío con las vi-bo-ri-tas metidas toitas en la cama, que sepas, por mi santa madre —dijo santiguándose— que te levantas tú y lo aguantas tú. Que ya sabes lo impertinente que se pone.

¡Pues no que nos ha jodio el aventurero este con sus fantasías!

Más regalos en el blog de Numancia 

FELIZ AÑO 2024

  7 meses sin escribir en el blog y vuelvo como en años anteriores con deseos de compartir que esta comunicación ocasional no se termine. Ha...